Consejos para bajar de peso y NO rendirse.

BAJAR DE PESO SIN RENDIRSE.

En esta época del año, muchos de nosotros y nuestros amigos nos pondremos “a dieta” para bajar esos kilos de más cogidos durante las navidades, el año 2016 o 20 años atrás. Poca gente consigue su objetivo de peso, y es que, debemos tener muy claro lo que queremos hacer, cómo hacerlo y enfocarlo con el método adecuado para conseguirlo, ya que, nuestro cerebro se negará a aceptarlo y no “ayudará”.

Algunos consejos para conseguir llegar a nuestro objetivo de peso son:

1. No hagas dieta, coge hábitos de vida saludables. Cuando cogemos hábitos de vida saludables, nos ayudan a ser conscientes de lo que comemos, de los errores que cometemos y de poner pautas para no caer en el mismo error todos los días. Por ejemplo: Cuando comemos fuera de casa es bueno saber qué tipo de menú vamos a tomar, debemos prepararnos antes de salir de casa comiéndonos una pieza de fruta y debemos mentalizarnos de que no va a ser “La última cena”. Además también debemos trabajar antes durante y después la fuerza de voluntad para no abusar de la comida. Si cada vez que tenemos un evento, es la excusa perfecta para “saltarse todas las reglas”, entonces no haremos más que coger malos hábitos, tener excusas para todo, y coger el peso una y otra vez cometiendo siempre los mismos errores.
2. Convéncete de que sí puedes bajar peso y proponte un objetivo de peso a corto plazo. TODO repito TODOS PODEMOS PERDER PESO Y TÚ TAMBIÉN. Si otras personas lo han conseguido tú también sabrás bajar y mantenerte el peso. Olvídate de las excusas: es que…tengo el metabolismo lento, es que tengo…tal enfermedad, es que…no tengo tiempo de…, y ponte en marcha.
3. Sé realista. No todas las semanas se baja de peso, es posible que algunas te mantengas o ganes algo, es normal. Lo importante es analizar por qué no ha ido bien y seguir SIEMPRE adelante.

El cuerpo SIEMPRE agradece que lo cuidemos, aunque no bajes de peso. Unos hábitos de vida mantienen el peso durante toda la vida, y lo más importante, previenen muchas enfermedades (algunos tipos de cáncer, colesterol, hipertensión, infartos…). Esto nos hace estar bien con nosotros mismos y con nuestro entorno. Por último, se optimista y positivo, eres capaz de hacer todo lo que te propongas y acude siempre al especialista adecuado, al nutricionista. Ya que un podólogo no debe hacerte masajes o radiografías, no cualquiera puede  hacer las dietas adecuadas.

Y recuerda: «Cuando sientas que vas a rendirte, recuerda por qué empezaste»